Libros de ayer y hoy
Ricardo Monreal no quita el dedo del renglón para consolidar el proyecto de la Cuarta Transformación. Y es que considera indispensable democratizar los procesos internos de Morena para la designación de sus candidatos a puestos de elección popular.
Ésa es una de las principales banderas del movimiento que encabeza Andrés Manuel López Obrador, la herencia de la corriente democrática del viejo partido de Estado que dio origen al PRD, partido político que impulsó la figura política del tabasqueño.
Respeto a la voluntad popular, fin del dedazo presidencial, elecciones libres, sin cargada de funcionarios a favor de algún candidato o con la preferencia especial de Palacio Nacional, esas han sido algunas de las consignas que la izquierda ha exigido en las calles, en las Cámaras del Congreso, en los órganos electorales.
¿Qué hay de extraño entonces, de que un militante y fundador de Morena enarbole una causa histórica de quienes forman parte del Movimiento de Regeneración Nacional?
Por eso, el senador insiste en que las encuestas, como método para elegir a candidatos, no son confiables, sobre todo si su metodología es opaca, sobre todo si desde el Zócalo capitalino se insiste en mencionar a quienes podrían suceder a López Obrador y se excluye su nombre.
Ricardo Monreal sabe remar contra corriente, conoce bien los vericuetos del sistema político mexicano y ha encontrado en la iniciativa que presentó el Ejecutivo, en materia político-electoral, una oportunidad para democratizar a los partidos y, de paso, alcanzar la Presidencia de 2024.
El presidente de la Junta de Coordinación Política coincide con el objetivo de reducir el presupuesto para la organización de las elecciones, en incorporar el voto y la urna electrónicos, en reducir el número de consejeros electorales y el de los integrantes del Poder Legislativo.
Pero también insiste en que el Instituto Nacional Electoral organice elecciones primarias en los partidos políticos, para la designación de sus candidatos a puestos de elección popular, entre ellos, el candidato de Morena a la Presidencia de la República de 2024.
Se trata de un mecanismo que se puede incluir en la Ley, con una reforma que sólo requiere de la mayoría simple en las Cámaras del Congreso y que se puede realizar un año antes de que inicie el proceso electoral, para elegir al nuevo titular del Ejecutivo Federal.
Para nadie es un secreto que, una vez que concluya el proceso electoral del 5 de junio, puede arrancar el Parlamento Abierto para analizar la reforma electoral en la Cámara de Diputados, es decir, el debate sobre la propuesta de Monreal puede tomar forma en la colegisladora y detonar su debate en el Congreso Nacional de Morena.
Se trata, enfatizó el senador durante una entrevista, de una cuestión de voluntad política, para que se reforme la Ley, se modifiquen los estatutos y se profundice la democracia interna del partido.
TIEMPOS REALES
1.- El diputado guanajuatense Juan Carlos Romero Hicks abrió ya públicamente de ser quien, en su momento, encabece la alianza opositora a MORENA en las presidenciales de 2024. Romero Hicks ha sido rector de la Universidad de Guanajuato, Gobernador de esa entidad, senador de la república y actual es diputado habiendo ganado su reelección con gran amplitud. Dentro del espectro de aspirantes del PAN a encabezar la alianza en el 2024, solamente se ve como contador serio de Romero Hicks al ex gobernador queretano Francisco Domínguez.
2.- El triunfo de Checo Pérez en el Gran Premio de Mónaco por una vez más en evidencia que para brillar en lo más alto del ámbito deportivo, lo peor que le puede pasar a un atleta es caer en manos de la CONADE. Checo Pérez es un piloto mexicano que solo y su alma ha sabido sortear los pesados intereses de la mafia que maneja la Fórmula Uno.
3.- Según David Páramo, el reconocido Padre del Análisis Superior, la multa que piensa la CRE, y detrás de ella el inefable Manuel Barttlet, cobrarle a Iberdrola simple y sencillamente será muy difícil de aplicar por los múltiples amparos a que tiene derecho la empresa acusada de vender ilegalmente energía eléctrica en México. La CRE quiere que Iberdrola, así como así, les pague más de ¡9 mil millones de pesos!. La verdad es que todo pinta a una nueva ingenuidad de los comisionados reguladores de la energía.