Indicador político
Faulkner. Advertencia: virus extranjeros
En medio de las situaciones que vive México en esta etapa electoral tan movida y lo
sucedido con la agresión del gobierno ecuatoriano respecto al cual ya se fincó la denuncia
ante la Corte Penal Internacional, aparece seguido la información de una campaña de
vacunación que debe ser tomada en cuenta, con urgencia. Hay un déficit grave en la
vacunación sobre todo en niños, porque al parecer las familias dejaron de lado esa atención
que tuvieron a lo largo de décadas. Eso impulsa en este momento una campaña masiva de
vacunación contra enfermedades como el sarampión, poliomielitis y rubéola. En el caso de la
primera que ya había sido erradicada, al parecer no proviene de México sino del exterior,
EL SARAMPIÓN VIENE DEL EXTRANJERO Y TIENE GRAVES SECUELAS
Las advertencias que se están haciendo desde el sector salud en los últimos meses en torno
a la presencia extranjera del sarampión, parece que es más peligrosa de lo que expresa. Al
grado de que se informa que cuatro personas, entre ellas un bebé, que han aparecido con
esa enfermedad, están siendo investigadas a través de un seguimiento, ¿Donde obtuvieron
el virus y desde cuando? Eso al parecer está ocurriendo en otras partes del mundo y se
relaciona en primera instancia como ya se dijo, al abandono de la vacunación tradicional
durante la etapa de la pandemia, cuando era más urgente aplicar la vacuna contra el Covid.
La situación que se produce a partir del virus del sarampión, provoca una serie de graves
enfermedades como la neumonía, la encefalitis y otras, que pueden llevar al desenlace final.
EL NOBEL FAULKNER Y SU ADVERTENCIA CRÍTICA EN MOSQUITOS
Aparentemente no era tan dramática la situación cuando William Faulkner escribió Mosquitos
en 1927 (Mosquitoes Alfabia Barcelona 2009), y digo aparentemente porque hacer un símil
de los mosquitos con los seres humanos, puede resultar a la postre más peligroso, porque la
estulticia es peor que un virus mortal. Los mosquitos. no hay que olvidarlo, pueden causar
enfermedades como el paludismo, y otras más graves que pueden ser mortales. Pero
el escritor estadounidense toma a los mosquitos como metáfora y relaciona la banalidad, lo
vacío, lo supérfluo, con el sonido intermitente de los pequeños insectos que a veces giran a
nuestro alrededor. En un viaje con distintos personajes de la farándula, de la llamada
intelectualidad, de las clases altas de su país, exhibe lo intrascendente de los personajes
reunidos y de su obsesión por el sexo, la decadencia y la vejez. Algunos relacionan parte de
esta segunda novela de Faulkner como la primera de las tres partes de El ruido y la furia (
título tomado de una frase de Shakespeare) relatada por el minusválido Benjy en torno de
una familia poderosa, en plena decadencia. Compara la charla obtusa de los asistentes al
viaje, con el vuelo de un insecto, los mosquitos y redondea una sátira que empezó a
catapultar a Faulkner al premio Nobel 1949 y más tarde al Púlitzer. Y conste que no conocía
los virus que nos han agredido en los últimos años.