Teléfono rojo
Dice Denis Jeambar en su libro Elogio de la Traición; “Todos comprenden que es muy loable que un príncipe cumpla su palabra y viva con integridad, sin trampas ni engaños. No obstante, la experiencia de nuestra época demuestra que los príncipes que han hecho grandes cosas no se han esforzado en cumplir su palabra…”
Hoy la política del país vive una de sus etapas más sucias, obscenas y deshonestas.
Actores individuales y colectivos de nuestra vida pública están protagonizando un espectáculo de tiempo de traiciones que parece olvidar que el país está padeciendo gravísimos problemas económicos, de inseguridad, de salud y de una incompetencia de los encargados de las tareas de las áreas más sensibles de gobernar en los tres niveles del caso.
En el sistema político mexicano el presidente detenta un poder total. Sus decisiones son regularmente actos unipersonales. El presidente puede quitar o poner en cualquier cargo, de cualquiera de los tres poderes que constituyen al estado nacional, a quien considere inconveniente, incompetente o renegado a sus designios históricos.
Llama la atención que López Obrador “reclame” una presunta deslealtad de Ricardo Monreal por haberse abstenido en las dos votaciones en las que se decidió que la Guardia Nacional pasara a ser “administrada” por la SEDENA.
Le dice el presidente al zacatecano que su abstención favorece a los reaccionarios y cretinos que se le oponen. Lo amonesta, pero no lo sustituye en su función como líder parlamentario.
Esa es una potestad incompartible del poder presidencial en México.
La actitud del primer mandatario nos deja la impronta de que puede regañar, a veces cuando siente necesario hacerlo, pero que no va más allá de la reconvención cuando el amonestado ha sido un partidario leal e histórico de sus luchas sociales y políticas, como es el caso de Ricardo Monreal.
Otra razón de peso para que la llamada de atención no pase de ser eso, es que Monreal ha sido un conductor por demás eficiente para lograr que se concreten en el senado las más controvertidas propuestas enviadas por el tabasqueño.
Sin duda que Monreal, en ocasiones innecesariamente, se pronuncie por defender su integridad personal y política. Eso todo mundo se lo reconoce. Por ello, como dijo el clásico de Juárez, ¿pero qué necesidad de manifestarse como un político de criterio independiente si ya tiene el reconocimiento de la clase política en ese sentido?
Cerca del presidente López Obrador, eso es evidente, hay un grupo de colaboradores que sencillamente no quieren a Monreal. No lo quieren ni como líder del Senado y menos como integrante de la baraja de MORENA como presidenciable en el 2024.
Son ellos, esos aprendices de consejeros áulicos, los que hacen grandes expresiones del presidente que parecen un rompimiento con el zacatecano.
Eso hacen los que le hablan al oído al presidente en contra de Ricardo Monreal. Pero el hecho importante e incuestionable es que el presidente lo mantiene, por eficaz y por leal, en liderazgo de la Cámara Alta.
México necesita de sus políticos una actitud realista de cara a la grave problemática que padecemos.
Convertir una declaración presidencial sobre Monreal en el asunto más importante de la agenda nacional, no solo es un despropósito, sino que es una deslealtad tanto al presente como al futuro de la nación.
Pero ni hablar, tenemos que aguantar esa gritería porque así se calientan los grillos cuando olfatean que la sucesión presidencial está ya muy cercana.
EN TIEMPO REAL.
1.- Mucha molestia hay entre panistas de viejo cuño por el hecho de que Marko Cortés haya mandado al gobernador de Querétaro, Mauricio Kuri, a decir a través de un video cuya difusión debió bastante cara por la profusión con la que se manejó, que el PAN sin necesidad de aliarse con nadie le va a ganar a MORENA las elecciones presidenciales del 2024. Los panistas de viejo cuño, así como los jóvenes que son verdaderos militantes de la ideología de Gómez Morín, están encrespados porque mandan a Kuri como vocero del partido siendo que nunca ha estado en el padrón de militantes y que ha dicho que es empresario y no político, actividad que en el fondo desprecia.
2.- Quien sigue siendo un eficaz funcionario dentro del equipo presidencial de primera línea, es el secretario de Hacienda Rogelio Ramírez de la O. El pronóstico para nuestro país en materia de inflación ya no es tan negro como se veía venir para el próximo año. Las medidas tomadas en Hacienda están fortaleciendo de una manera clave los programas sociales del presidente Andrés Manuel López Obrador.
3.- Crecen las apuestas en el sentido de que Alejandro Moreno Cárdenas, el inenarrable Alito, no cargará los peregrinos como dirigente nacional del PRI. Una fuerte corriente de ex dirigentes nacionales, senadores, ex diputados y ex gobernadores están organizando un evento en la sede nacional del PRI para manifestarse por un cambio en la presidencia nacional del tricolor. Suena muy fuerte en esta corriente el nombre de Miguel Ángel Osorio Chong.