Indicador político
¡Marcelo: La farsa “engaña-bobos”
Y ahora, Marcelo amaga con dejar Morena, si no lo hacen candidato.
Lo cierto, sin embargo, es que asistimos a una farsa “engañabobos” diseñada desde Palacio para pulverizar el voto opositor.
Y es que para muchos de quienes conocen a Marcelo Ebrard; de los que saben de su inteligencia, experiencia y la solidez de su preparación, no hay explicación posible al desenlace de la sucesión presidencial en Morena.
Por ejemplo, no hace sentido la supuesta o real ingenuidad del ex canciller, sobre todo cuando no es la primera, ni la segunda, sino la tercera ocasión que habría sido engañado por el mismo “amigo” político.
Por eso, cada vez son más los ciudadanos y analistas que dudan de la autenticidad del enojo de Marcelo y no creen la presunta “rebelión en la granja” que estaría a punto de encabezar.
Más aún, crecen las voces en dirección a que asistimos a uno más de los groseros montajes de Palacio para pulverizar el voto opositor y, con ello, garantizar el Maximato de López Obrador, a través de la señora Claudia.
Y sí, es real lo amañado de la encuesta, pero el verdadero engaño está en el otro extremo; y sólo basta ver lo poco o nada convincente de las “pataletas” de Marcelo, una vez que lo habrían “chamaqueado” desde Palacio.
Y si no lo creen, aquí las dudas.
¿De verdad Marcelo no conocía la clase de tramposos con los que se metió? ¿No sabía que sería víctima de una “chicanada” como la que lo dejó fuera de la carrera presidencial?
¿No sabía el ex canciller que su principal escudero, Mario Delgado, lo traicionaría por 30 monedas? ¿No sabía que desde el origen de los tiempos de Morena -desde el año 2000–, la preferida siempre fue la señora Claudia?
¿No sabía “el carnal” que su amigo, López, nunca le entregaría la estafeta presidencial, porque siempre dudó de su lealtad y era celoso de la inteligencia y habilidades de Marcelo? ¿No sabía que López exige total sumisión, absoluta incondicionalidad y lealtad ciega, sorda e irracional?
Está claro que, como pocos, Marcelo conoce a “Andrés” –como lo tuteaba–, y que, por esa razón, dejó pasar a “su amigo” en las presidenciales de 2012 y 2018, en espera de que la recompensa llegara en el 2024.
¿Y, entonces, qué pasó? ¿Acaso se trata de un exceso de confianza, de ingenuidad, torpeza, o..? Sí, aquí es donde “la marrana tuerce el rabo”.
Es decir, que día a día se suman elementos que permiten suponer que, en el caso de Marcelo, “si tiene pico de pato, patas de pato, cola de pato y si grazna como pato”, tenemos el derecho de creer que la presunta rebelión del ex canciller “no es más que un pato”; una farsa “engaña-bobos”.
Dicho de otro modo, resulta que la supuesta ingenuidad de Marcelo y la aparente “rebelión en la granja” no son más que parte de una trama mayor en la que Marcelo y otros presidenciables estarían jugando el papel de comparsas para pulverizar el voto opositor y, con ello, favorecer y/o garantizar la victoria de la señora Claudia.
Pero vamos al paso a paso.
1.- ¿Cuál será la ruta de escape para Marcelo frente al “horrible fraude” que cometió Morena en su contra?
Está claro que no juega cartas para beneficiar sus personalísimas aspiraciones presidenciales, sino que, por el momento, lo más importante es ganar tiempo para conocer a la perfección la puerta de escape donde su presunta rebelión le resulte más favorable a la pandilla criminal de Palacio.
2.- Por eso, de manera nada casual, la secretaria general de Morena dio pruebas irrefutables del escandaloso fraude cometido contra Marcelo.
3.- Todo ello al tiempo que el propio Ebrard descartó la posibilidad de una candidatura independiente.
4.- Por eso, ayer lunes, Marcelo impugnó la encuesta y exigió que se reponga el proceso; lo que significa un amago de dejar Morena.
5.- Y también por eso rechazó, de manera temporal, la posibilidad de postularse por Movimiento Ciudadano, el mayor partido palero de AMLO.
6.-. Mientras todo eso ocurre, desde Palacio intensifican la persecución de opositores, críticos y empresarios que se mueven en los primeros círculos de la candidata, Xóchitl Gálvez, contra quienes lanzarán todo el peso de las instituciones del Estado, para llevarlos presos o desaparecerlos.
7.- Al mismo tiempo, seguirán alzando la mano presuntos candidatos independientes, como el ultraderechista, Eduardo Verástegui, a quien en realidad apoyan López y por Donald Trump y cuya utilidad es la de capturar del voto de “los idiotas útiles” de la extrema derecha mexicana que, si bien hoy cuestionan al gobierno de AMLO, nunca votarían por la senadora hidalguense.
8.- Es decir, está en marcha el más ambicioso proyecto de “divide y vencerás”; estratagema que parece un recurso desesperado de Palacio.
Así, al final de cuentas, millones de mexicanos podrían volver a cometer el “pecado original” de llevar al poder a otro peligro para México; peligro de nombre Claudia, que hoy todos conocen y muchos han padecido.
Sí, están advertidos: no se vale que con el tiempo los idiotas de siempre digan que “no podía saberse”. Al tiempo.