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CULIACÁN, Sin., 27 de julio de 2024.- Decenas de universitarios exigieron justicia y recibieron al exrector de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS), Héctor Melesio Cuén Ojeda, en un emotivo homenaje de despedida como uno de sus grandes líderes y activos más importantes.
Como un gran defensor del pensamiento de libertad de Eustaquio Buelna, Cuén Ojeda, quien fuera rector en el periodo 2005-2009, recibió el reconocimiento en cuerpo presente en el edificio central de la máxima casa de estudios, donde se forjó el proyecto visionario de la universidad pública de los sinaloenses.
En representación de la comunidad universitaria, Robespierre Lizárraga Otero, encargado del despacho del a rectoría y uno de sus amigos más allegados, al realizar la primera guardia de honor alrededor del féretro de Cuén Ojeda expresó sentirse invadido por el sentimiento de la orfandad de quien fuera un líder nato, solidario y siempre con muestras de un gran apoyo moral.
“En estos mismos espacios me tocó atestiguar una parte trascendental de toda su obra y posteriormente su arribo y llegada a la rectoría de la universidad, luchando, abriéndose paso a la adversidad, afrontándola y plantando cara, logró inspirar a toda una comunidad a realizar cambios y logros extraordinarios, mejoras y triunfos que todavía son parte de esta gran realidad de la Universidad Autónoma de Sinaloa”.
“El maestro era el faro, era el guía y era la referencia para todos nosotros”.
Lizárraga Otero se dirigió a la familia de Héctor Melesio Cuén Ojeda a quienes refrendó su máximo apoyo, expresando que el dolor que viven no se comparte, se multiplica en todos quienes les acompañan.
Señaló que las balas asesinas que le arrancaron la vida al también dirigente político no detendrán su liderazgo, porque ello trascenderá en cada uno los presentes y que exigen justicia y esclarecimiento de lo sucedido.
“Esas balas asesinas no van a apagar su liderazgo, su trascendencia está en cada uno de nosotros, están impregnados en cada uno de los muros de este edificio y en cada logro de la universidad; no acallaron su voz, dieron eternidad a su inspiración y aquí frente a él, le decimos, le juramos que seguiremos adelante, no nos van a detener en la lucha que él encabezo. ¡No cesaremos hasta que haya justicia para Héctor Melesio Cuén!”.
Hizo un llamado a seguir adelante, a no rendirse a vivir con intensidad esa filosofía y forma de trabajo en la que Cuén Ojeda los forjó, porque su trabajo le ha dado eternidad a su presencia.