
Lleva a cabo Gabinete Federal de Seguridad reunión privada en Culiacán
CULIACÁN, Sin., 3 de agosto de 2025.– Ante la llegada y permanencia de miles de efectivos del Ejército, la Marina y la Guardia Nacional a la capital sinaloense, la ciudadanía comienza a formar sus propias opiniones sobre si esta estrategia federal realmente ha cambiado la percepción de seguridad en la ciudad.
En un breve recorrido por distintos puntos de Culiacán, se recogieron testimonios de personas que día a día transitan, trabajan o viven bajo la constante vigilancia de los retenes y patrullajes en avenidas clave.
Persisten los hechos violentos y la inseguridad continúa, opinan algunos.
Para Marcos, empresario del giro restaurantero, la presencia militar no ha generado un cambio real.
“A pesar de que se anunció el arribo de miles de autoridades federales, los hechos de alto impacto se siguen presentando. Esto no garantiza que los grupos se detengan; continúan haciendo lo que han estado realizando desde septiembre de 2024. Siento que continúa igual la inseguridad. El que estén o no estén, no inhibe”, expresó con preocupación.
Una sensación ambigua: más vigilancia, pero también más tensión.
Aunque reconoce que los retenes y operativos son frecuentes, un ciudadano que prefirió omitir su nombre señaló sentirse más tenso que seguro.
“He visto retenes sobre todo en algunos puentes, pero lejos de sentirme seguro, existe la zozobra de que en cualquier momento pueda haber un enfrentamiento. La inseguridad continúa, aunque estén los soldados en la calle”, apuntó.
Otros ciudadanos reconocen mejoras en la percepción de seguridad
En contraste, Ricardo, comerciante del centro de Culiacán, considera que la fuerte presencia de autoridades federales ha motivado a muchos a retomar su vida cotidiana:
“Hay mucha seguridad en las calles, y eso me motiva a salir a hacer deporte. Antes, por miedo, la gente no salía. Ahora veo retenes y presencia en puntos estratégicos, y eso ha aumentado la percepción de seguridad”, comentó.
“Me detienen hasta nueve veces al día, pero lo veo bien”.
Ortiz Hernández José Alberto, joven trabajador, asegura que aunque las revisiones pueden parecer excesivas, las valora como una medida preventiva:
“Sí me paran mucho, abren la mochila, revisan el auto, pero todo ha sido con respeto. Siento que sí hay más seguridad y ando más tranquilo por la ciudad. Eso ayuda a inhibir la delincuencia”, compartió.
Los repartidores, entre los más vigilados, también notan cambios
José, joven repartidor de comida a domicilio, coincide en que, aunque a veces es molestado por las autoridades, valora su presencia:
“Hubo un tiempo en que no se podía ni salir a la calle. Ahora, poco a poco, la gente va retomando sus actividades, y el trabajo también se reactiva. Lo veo positivo, aunque aún falta mucho por hacer”, dijo.
Las opiniones recogidas reflejan una ciudad dividida: mientras algunos ciudadanos sienten mayor tranquilidad, otros siguen con temor ante la posibilidad de que los operativos puedan escalar en situaciones violentas.
La presencia de las fuerzas federales, si bien visible, aún no logra generar consenso sobre su efectividad para reducir la violencia que por años ha afectado a Culiacán.