
Indicador político
El adiós de Bergoglio y la grilla vaticana
Como sucede en México donde cualquier ciudadano mexicano que cumpla requisitos puede llegar a ser presidente, lo mismo pasa en el Vaticano con el papa. Puede ser pontífice cualquier católico que tenga los requisitos para serlo. Claro que en ambos casos suena a patraña, porque en el primer caso tiene que ver el partido, las posibilidades de la candidatura y desde luego los votos. En la ciudad del Vaticano se oye muy bonito que un fiel sin deberla ni temerla, de pronto sea el soberano de la Santa Sede y el hombre que podrá ejercer el poder por lo general hasta su muerte. No es así, porque a la mano está el Colegio cardenalicio para cuidarse que sea uno de los 252 cardenales el que resulte electo. Es una función parecida a la que ejerce el Congreso en México, cuando hay que elegir a un nuevo presidente. Pero en el caso religioso, de esos 252, muchos deben ser respetables ancianos que superan los 80 años y que según el código canónico, no pueden votar. Mientras el Colegio se apodera del gobierno en este momento, 135 cardenales que si pueden votar y ser votados, están en la expectativa…y la grilla.
HOMBRES AL FRENTE DE UNA IGLESIA SIN DIRIGENTES MUJERES, ESPERAN UN PAPA
Mientras se dirime lo de la velación de Jorge Mario Bergoglio, y el cadáver es expuesto en la iglesia vaticana para que lo visiten los fieles, está claro que la grilla interna trasciende toda santidad. Será hasta que el cuerpo descanse, que empezará la movilización por el puesto. No suele tardar mucho porque se necesita al papa. Alguna vez se coló o fue invención, que hubo una mujer papa o papisa, que disfrazado de hombre logró llegar a los altares. No hay certeza, pero de los 266 papas que ha habido, algo de eso podría haber ocurrido en tiempos remotos, un transgénero quizá, en entornos muy lejanos de esa religión. Pudo haber ocurrido que se tratara de una persona gay. Y no es remoto dado la preferencia vaticana por la representación del género masculino que en algún escándalo que trasciende, ha salido a la luz. Las mujeres solo aparecen como monjas o como empleadas o funcionarias administrativas. No por algo el celibato predomina desde siglos y ya hay autores, Wilkie Collins entre ellos, que desde el siglo XIX en su libro El hombre de negro ( editorial Collins España, 2017), señala la lucha dada por sacerdotes para quitarse de encima esa carga. Para muchos sacerdotes la cosa no es tan complicada. En reportajes realizados por mi en Italia y España entrevisté a sacerdotes casados o arrimados, con mujer y con hijos, en sus propias parroquias. Y ellos viviendo en comunidad con los pueblos que los respetaban. En mi último trabajo en los noventa del siglo anterior, se hablaba de 17 mil sacerdotes con familia, solo en Italia.
EL ADIÓS DEL PAPA FRANCISCO MUY DIFERENTE A OTROS PAPAS
Ya se ha señalado que a diferencia de muchos papas, Bergoglio no será sepultado por decisión propia en la tumba vaticana destinada a esos personajes. Estará fuera, en un lugar señalado por él, la basílica Santa María la Mayor. El fue especial también en sus aposentos, porque vivía fuera del Vaticano. No recibió salario en los 12 años en los que fue papa; solo le pagaban sus gastos. Pese a ello era un papa feliz, que no esperaba fortunas y señalaba su preferencia por los pobres. En Argentina la posición de Javier Milei trató de ser diferente a lo anterior, al declarase triste, cuando se recuerda que llegó a insultarlo cuando Bergoglio estaba todavía en ese país. Situación que muy prudente el papa desestimó cuando el llamado presidente argentino lo visitó en el Vaticano. Y lo que queda esperar es que dada la influencia que tiene esa religión, su nueva representación sea un papa progresista, que entienda con profundidad los problemas que tiene el mundo y sirva en su intervención. Hay el peligro del conservadurismo dado el gobierno de ultraderecha que está en Roma, pero ahí se irá viendo hasta el momento en que salga el famoso humo blanco y desde el Colegio cardenalicio se diga: ¡Habemus papam!